Si te hablan de Tahití seguro que, aunque no hayas estado nunca, entre las primeras imágenes que vienen a tu cabeza estarán las aguas turquesas y una bella tahitiana con una corona de flores. Éstas son las flores de tiare (Gardenia tahitensis).
El aceite de Monoi se hace a partir de aceite de coco y flores de tiare. Las flores se dejan macerar en el aceite y le dan el agradable y característico perfume que a los que sí han estado en Tahití les transporta a estas islas de la Polynesia.
El aceite de monoi se comercializa con una estricta denominación de origen que certifica que el producto tiene todas sus cualidades. Para conseguirlo los productores deben recoger las flores justo antes de que se abran y dejar-las macerar durante 15 días. La proporción debe ser de 15 flores por cada litro de aceite de coco.
Aunque las cualidades del Monoi de Tahití se reconocieron oficialmente en 1992 cuando se creó la denominación de origen, las mujeres de las islas lo utilizan desde tiempos inmemoriales para cuidar, proteger, nutrir y suavizar su piel y su cabello.
Cualidades del aceite de monoi
Es hidratante y nutritivo. Tiene una alta concentración de ingredientes activos que le confieren sus cualidades nutritivas e hidratantes. Así mismo, el monoi de Tahití tiene la capacidad de retener la humedad de la piel aportando elasticidad y suavidad. Posee cualidades refrescantes y además prolonga el bronceado.
Suavizante: es un excelente reparador de cabellos dañados por su efecto suavizante y nutritivo. Su uso habitual mejora la calidad y consistencia del cabello.
Se puede utilizar como aceite de masaje. Sus propiedades relajantes ayudan a aliviar el dolor de las pequeñas contusiones y las agujetas.
Su agradable aroma también hace que utilice para perfumar ambientes.
Los pescadores de la Polinesia lo utilizan para crear una película invisible sobre su piel que la protege del frío, del calor y de la humedad.
Productos Soivre con Monoi de Tahiti
Si buscas un aceite hidratante y nutritivo de textura ligera para tu piel, Soivre te ofrece dos excelentes opciones. Por un lado, tenemos el Polynesian Oil Coconut & Monoï con una exclusiva combinación de aceite de coco y flor de gardenia tiare y enriquecido con vitamina E. Nutre en profundidad y regenera la piel. Por otro lado, si además de estas cualidades buscas realzar tu bronceado, tu opción es el Polynesian Oil de Zanahoria & Monoï. Además de las cualidades del monoi que ya hemos expuesto, el aceite de zanahoria, rico en carotenos estimula la secreción de melanina, realza el bronceado y lo preserva durante más tiempo. Puedes utilizarlo también como aftersun para reparar y calmar la piel después de tomar el sol.
El aceite de Monoi se encuentra también en la fórmula del Golden Oil Sublime de Soivre, un aceite seco elaborado con productos 100% naturales para rostro, cuerpo y cabello. Realizado a partir de: jojoba, argán, zanahoria, pepita de uva, almendras dulces y Monoi de Tahití y enriquecido con vitamina E regenera y repara la piel y la deja suave y satinada.