Las cremas corporales hidratantes forman parte de nuestras rutinas de belleza. Generalmente no prestamos demasiada atención y de manera automática las aplicamos en todo el cuerpo y ¡listo! Pero, ¿le estás sacando todo el partido suficiente a las cremas para el cuerpo? ¿Cómo aplicarlas de forma correcta? ¿Cómo aprovechar mejor sus beneficios?

En el post de hoy comentamos algunos consejos esenciales para aplicar las cremas corporales y obtener excelentes resultados en poco tiempo.

Consejos para aplicar las cremas corporales hidratantes

#1- Encontrar la mejor opción para tu piel

Evita las cremas hidratantes que no especifican el tipo de piel para la cual son recomendadas. El concepto: “para todo tipo de piel”, no atenderá en profundidad a tus necesidades.

En cuanto a tipo de envase, son mejores los recipientes con dosificador ya que se salvaguardan mejor las propiedades del producto y evitamos que se cuelen impurezas en la crema.

#2- Ponerlas en todo el cuerpo

La crema corporal está diseñada para toda la piel del cuerpo, así que no olvides aplicarla en ninguna zona: todas ellas necesitan ser cuidadas e hidratadas. Como ya sabes, para la piel del rostro sí deberás utilizar una crema específica, ya que esta zona precisa productos de mayor delicadeza.

#3- Priorizar las zonas difíciles

En tu cuerpo existen zonas más castigadas en las cuáles debes ser más generosa en la cantidad de producto que aplicas. Los codos, las rodillas y las plantas de los pies son áreas sedientas de cremas corporales hidratantes.

#4- Untarlas con movimientos que estimulen la circulación sanguínea

Cuidar tu piel con cremas corporales hidratantes es un ritual para mimarte. Pon toda tu atención en ello y tendrás mejores resultados. Pon sobre la palma de tu mano una cantidad similar a una almendra. Frota ambas palmas y luego pásalas sobre tu piel para aplicar bien el producto.

Realiza movimientos circulares en la zona de los glúteos, el abdomen y los hombros. En brazos y piernas el movimiento se hace de abajo hacia arriba.

Tus manos masajeando la piel estimularán la circulación sanguínea en la epidermis y facilitarán la absorción de la crema. Realiza tantas aplicaciones como sean necesarias en cada zona. Masajea hasta que veas que la crema se absorbe toda y no tienes vetas blancas.

[Tweet «Codos, rodillas y plantas de los pies son áreas sedientas de #cremascorporales hidratantes.»]

#5- Hacer exfoliación o peeling corporal cada 15 días

Nuestra piel se exfolia de manera natural y con delicadeza mediante las duchas, el roce de la ropa, el contacto con superficies, el aire… Vamos perdiendo las células muertas del exterior de la epidermis y emergen las nuevas. Es un proceso continuo que se hace más lento en la medida en que aumenta nuestra edad. Por ello, para tener una piel radiante es conveniente hacer exfoliaciones cada 15 días. De esta forma, aplicarás mejor la crema en los tejidos y estos recibirán mejor sus beneficios.

Atención, muy importante: infórmate primero de los cuidados específicos para peeling según tu tipo de piel. No todas las pieles lo admiten y hay que tener en cuenta si es piel grasa, seca o con tendencia a irritarse. Por ejemplo, para pieles secas y muy necesitadas de nutrición nuestra crema corporal con Rosa Mosqueta es ideal. No dudes en probarla si tu piel tiene estas características.

#6- Evitar las mezclas de productos

¿Usas cremas anti-celulíticas?  ¿Te aplicas algún tratamiento quitamanchas? En las zonas donde usas algún producto específico en busca de un resultado concreto, no es necesario aplicar cremas hidratantes.

La mezcla de unos productos con otros podría obstaculizar los resultados deseados. Mezcla productos solo si lo indica el fabricante porque es una única línea cosmética.

#7- Definir la frecuencia: ¿1 o 2 veces al día?

La crema corporal hidratante se recomienda que se aplique después de la ducha. Si eres de las que realiza la ducha por la mañana, justo después es un buen momento para aplicarte las cremas. Y si antes de ir a dormir también realizas una ducha puedes volver a hidratarla: apenas echarte un poco de agua sobre la piel es suficiente (no necesitas jabón) y luego tu ritual de hidratación.

[Tweet «Es ideal aplicar #cremacorporal después de la ducha: la piel está limpia y los poros están abiertos»]

#8- Elegir el momento más adecuado

Imagina que quieres barnizar una mesa pero está llena de grasas, impurezas y suciedad. ¿Verdad que lo primero que harías sería limpiar bien la superficie de la mesa antes de aplicar el barniz? Pues lo mismo ocurre con el momento de las cremas.

Lo ideal es aplicarte cremas después de la ducha por dos razones: la piel está limpia y los poros están más abiertos, de esta forma penetran más los principios activos hidratantes.

Como ves, aplicar cremas que hidraten la piel de tu cuerpo aumentan su flexibilidad además de que la ayudan a regenerarse y ser más fuerte para enfrentar todos los agentes externos estresores.